Con el fin de impulsar la economía y mejorar el sistema industrial, Naberezhnye Chelny se esforzó por atraer inversiones. Casi al mismo tiempo, el Grupo Haier en China estaba buscando oportunidades de inversión adecuadas en el extranjero.

Sus actividades coincidieron y en 2015, después de varias rondas de negociaciones Haier decidió invertir en el Parque Industrial Kama “Master”, en Naberezhnye Chelny, para construir la nueva fábrica de refrigeradores de Haier Rusia.

Cuando se entra por la puerta del parque industrial, se puede apreciar una moderna y espaciosa fábrica con paredes blancas. Una asta de la bandera moteada de sol se erige delante de las torres de la puerta.

“¡Esto es genial! Pensé que nunca volvería a ver algo así”, exclamó un anciano, con su rostro lleno de arrugas y lágrimas de emoción en sus ojos, mientras entraba a la fábrica apoyado en su bastón y acompañado de por su hijo.

El hombre, Konstantin Viktor Petrovich, había trabajado en la construcción del parque industrial hace años y había sido testigo de su ascenso y su periodo de crisis. Había regresado al parque una y otra vez, con la esperanza de ver el lugar en auge una vez más. Sin embargo, cada vez que llegaba con esperanza, tenía que regresar decepcionado.

Pero esta vez, viendo a su hijo ocupado trabajando en el parque que había ayudado a construir, Petrovich estaba feliz y profundamente conmovido.

La fábrica de Haier ha creado más de 800 empleos y atrajo a muchos proveedores de apoyo para establecerse en el parque.

Para Petrovich, las glorias de su generación continúan en la fábrica de refrigeradores Haier Rusia y cree que el futuro de las nuevas generaciones de Naberezhnye Chelny será aún más brillante.

Sin embargo, ninguna reconstrucción o transformación es sencilla.

Un taller de producción en la fábrica de refrigeradores Haier Rusia

Después de que la fábrica comenzó a operar en Naberezhnye Chelny, aunque el gobierno local lo apoyó, al principio, las empresas y las personas locales estaban llenas de preocupaciones.

“Quieren traer de vuelta las líneas de producción obsoletas que se han desechado en China”. Este era el sentimiento predominante, especialmente entre algunas personas mayores que nunca habían estado en China.

Una empresa de refrigeradores cercana, con una fábrica local bien establecida y un capital considerable, también sufrió este tipo angustia. Los rumores abundaban en su taller y oficina de que Haier tomaría el mercado de su fábrica, lo que provocaría que sus pagos se redujeran o incluso que algunas personas fueran despedidas, por ello todos estaban preocupados.

No solo los empleados comunes estaban preocupados. El gerente general también estaba muy preocupado por la aparición de un futuro rival fuerte: ¿Cómo se posicionarían los refrigeradores de Haier y qué tan avanzadas eran sus tecnologías de producción?. Estas preguntas les daban muchos dolores de cabeza.

En caso de duda, siempre es mejor ver por uno mismo que escuchar a los demás. Para disipar las dudas de la gente, las autoridades de Haier pensaron que la mejor manera era dejar que las personas vieran la situación por sí mismas.

Por consiguiente, el Grupo Haier decidió invitar al presidente de la República, Rustam Minnikhanov, a visitar su sede en Qingdao en China y los pares locales en Naberezhnye Chelny fueron invitados a la nueva fábrica de refrigeradores en el parque industrial.

El resultado fue que los visitantes rusos tanto a la sede de Qingdao como a la fábrica en Naberezhnye Chelny quedaron asombrados y profundamente impresionados. Vieron cuán avanzadas eran las tecnologías de producción y cómo el modelo innovador de Haier combinaba el trabajo de los empleados con los requisitos de los compradores. Además, el plan de desarrollo de la fábrica de Haier Rusia incluyó la introducción de la línea de producción de refrigeradores más avanzada en el mundo.

Con todos los hechos sobre la mesa, las dudas de las personas se evaporaron.

En abril de 2016, se llevó a cabo una animada ceremonia de corte de cinta en la fábrica. El presidente Minnikhanov asistió. A medida que las máquinas comenzaron a funcionar en la fábrica alta, brillante y moderna, se podía ver que casi todos los operadores que trabajaban en las líneas de producción eran rusos. Finalmente, los residentes de Naberezhnye Chelny se sintieron aliviados.

Una moderna línea de producción en la fábrica de refrigeradores Haier Rusia

Verano es la época cuando la fábrica está más ocupada. Los talleres están llenos del sonido de las máquinas y todos están tan ocupados que ni siquiera tienen tiempo para tomar un descanso ni beber agua, incluso cuando tienen sed.

Sin embargo, un día de verano, Iván, el gerente financiero, no se encontraba en su escritorio como siempre. Iván estaba en el hospital, acostado en su cama en una profunda depresión. Fuera de su ventana, el cielo azul brillante, pero no estaba de humor para apreciarlo, ya que había tenido una hemorragia cerebral repentina y ni siquiera podía hablar. Se quedó tendido mirando al techo y eso fue todo lo que pudo hacer.

Mientras el líquido intravenoso del goteo entraba en su vena gota por gota, en su mente, la idea del alto costo del tratamiento lo estaba carcomiendo.

Aunque Iván había estado trabajando en la fábrica desde su creación y tenía un buen ingreso, la repentina enfermedad interrumpió la vida tranquila a la que estaba acostumbrado.

Ante la noticia de la enfermedad de Iván, la gerencia de la fábrica se apresuró a ir al hospital. Al enterarse de sus dificultades financieras, inmediatamente decidieron pedirles a todos los empleados que donaran para sus gastos médicos y que lo visitaran regularmente.

El amor tiene poder mágico. Con la ayuda de todos, Iván se recuperó completamente y volvió al trabajo. El único cambio es que él es más comprometido con el trabajo que antes. Como él dice, se siente obligado a trabajar más duro y a pagar la amabilidad de la gerencia y sus colegas en la fábrica.

Un caso como el de Iván no es el único en la fábrica.

“Todos nos sentimos muy a gusto trabajando aquí. Cuando tenemos algún problema, sabemos que la fábrica va a estar ahí para nosotros como refugio seguro”, dijo un empleado.

No es exagerado decir que cada empleado tiene una historia única sobre sí mismos y la fábrica. La razón es que aquí las personas siempre van primero, un concepto internalizado por toda la gerencia.

En un comienzo, la fábrica tenía una grave escasez de personal técnico. Para remediar esto, los trabajadores no calificados fueron enviados a la sede de Qingdao para una capacitación especial a un gran costo. Con respecto al trabajo de producción, la fábrica recompensa a los empleados en todos los niveles que presenten innovaciones prácticas y la gerencia presta gran atención a la comunicación cara a cara con los empleados para mejorar su sentido de participación.

Hoy en día, muchas empresas en Naberezhnye Chelny se basan en la filosofía de desarrollo de Haier. No solo ha mejorado su producción y eficiencia laboral, sino que también ha cultivado un grupo de talentos técnicos y gerenciales de primera clase que pueden trabajar por su cuenta.

Refrigeradores Haier listos para ser despachados

Ellos ahora son la esperanza y la fortaleza para el futuro desarrollo de Naberezhnye Chelny.

Si tienes la oportunidad de visitar Naberezhnye Chelny, no te sorprendas si los lugareños te saludan alegremente en chino.

Responder con un “Здравствыйте” (“hola” en ruso) sonriente será una respuesta aún mejor porque te devolverán más sonrisas y buena voluntad.

Hoy en día, Naberezhnye Chelny ha recuperado su vitalidad. Hay todo tipo de pequeñas tiendas que se multiplican en la ciudad, los restaurantes restaurados están llenos hasta el tope y puedes ver a muchos extranjeros paseando por las calles.

Todo esto, por supuesto, tiene mucho que ver con Haier.

La localización de Haier ha promovido en gran medida el desarrollo de las industrias locales.

Desde que comenzó a operar en Naberezhnye Chelny, Haier ha traído a 25 proveedores locales para producir piezas de maquinaria y su tasa de localización en la actualidad ha alcanzado el 69,2%. Además, Haier ha tomado la iniciativa de proporcionar capacitación gratuita a sus empresas asociadas para ayudarles a mejorar su capacidad de producción y servicio para que estas empresas en la cadena de suministro puedan adaptarse y crecer junto con Haier. Con su desarrollo y expansión, más y más compañías relacionadas han seguido a Haier a Naberezhnye Chelny. Hicieron inversiones y establecieron fábricas allí, lo que satisfizo las necesidades del desarrollo diversificado de las industrias locales.

La innovadora localización de Haier también ha satisfecho mejor las necesidades de la gente local.

Por ejemplo, a los rusos les gustan los guisos y las sopas que tardan mucho en cocinar. La gente generalmente no puede terminar un plato entero de una vez. Así que guardaron la sopa sobrante junto con el tazón en su refrigerador.

Cuando el equipo de investigación y desarrollo de Haier descubrió este hábito, diseñó un estante plegable para los refrigeradores vendidos localmente para acomodar este hábito. En este diseño, dos compartimentos pequeños adyacentes se pueden ajustar para convertirse en un estante grande, lo suficientemente grande como para acomodar el tazón de sopa. De esta manera, el problema con el que los rusos habían estado lidiando durante mucho tiempo —cómo colocar su plato de sopa en su refrigerador—, finalmente se resolvió.

Una vista de las calles de Naberezhnye Chelny

En agosto de 2019, el gobierno municipal de Naberezhnye Chelny decidió nombrar una calle cerca del parque industrial en honor a Haier.

Fue el mejor reconocimiento de los esfuerzos de Haier a lo largo de los años.