El invierno en Dusambé ya no es frío

Autores: Ma Liwenbo (China) y Karimov Suhrob Saidmurodovich(Tayikistán)

En las noches más oscuras de invierno, la ciudad de Dusambé, capital de Tayikistán, ilumina cálida el paisaje al pie del pico Ismail Samani, el más alto del país. La transformación se produjo después de que Tayikistán suspendiera en 2017 los racionamientos eléctricos que duraron 20 años, de manera que Dusambé se despidió de los fríos inviernos que había sufrido cuando no tenía suficiente suministro de energía.

Los apagones de invierno se convierten en historia

Los apagones eléctricos en invierno solían ser normales en Dusambé, que dependía de una central térmica construida en 1957. La potencia y la calefacción que producía eran insuficientes y, además, la planta funcionaba con gas natural, pero no podía obtener un suministro estable del combustible para satisfacer las necesidades de la vida diaria de la ciudad.

Tayikistán tiene abundantes recursos hídricos, pero su capacidad hidroeléctrica es bastante baja ya que muchas pequeñas centrales hidroeléctricas tienen que detener su funcionamiento en invierno cuando las aguas se congelan.

Debido a los apagones prolongados por todo el país, la escasez de energía obstaculizaba el desarrollo económico de Tayikistán.


La central termoeléctrica No. 2 de Dusambé

En invierno, las familias no podían usar muchos de sus electrodomésticos y muchas empresas industriales tenían que detener la producción debido a la escasez de energía. En climas extremadamente fríos, más empresas tuvieron que dejar de trabajar para poder satisfacer primero las necesidades básicas de los residentes.

La promesa de cambio se produjo cuando Tayikistán y China firmaron un acuerdo para construir la central termoeléctrica No. 2 de Dusambé. Esta se convirtió en la central termoeléctrica más grande de la ciudad, con capacidad para satisfacer el 60 por ciento de la demanda de electricidad de Dusambé. Los residentes ya no se angustian por la falta de electricidad en invierno, y las empresas industriales locales ya no tienen que suspender la producción en los meses más fríos. La red de líneas de transmisión aérea y los cables subterráneos construidos por el nuevo proyecto proporciona un flujo constante de energía que mejora la vida de las personas y facilita la industrialización de Tayikistán.

El presidente tayiko, Emomali Rahmon, habló muy bien del proyecto. “La central termoeléctrica No. 2 de Dusambé constituye un paso importante que hemos dado hacia el objetivo de la independencia energética”, manifestó. “La asociación estratégica entre Tayikistán y China se ha desarrollado rápidamente, especialmente en el campo de la energía. La planta de energía es una encarnación de esta buena colaboración y un modelo de cooperación de alto nivel entre nuestros dos países”.

Los líderes de la industria minera local han descrito elogiosamente la planta como un “motor poderoso” que impulsa el desarrollo económico de la región.

La empresa china TBEA Co., Ltd., que fabrica transformadores de potencia y construye proyectos de transmisión, desarrolló el proyecto de Dusambé. También ha ayudado a Tayikistán a construir un sistema de soporte de energía independiente y completo. Hace más de 10 años, TBEA construyó una subestación transformadora de 500 kV en los suburbios de Dusambé. También construyó una importante arteria de transmisión de energía norte-sur en Tayikistán, que pasa por una meseta a 3.800 metros sobre el nivel del mar. Además, la compañía ha financiado la construcción de cuatro escuelas para proporcionar a 6.000 estudiantes locales un ambiente de estudio moderno.

Calidez en medio del invierno

Calidez en medio del invierno

Para proteger el medio ambiente, Brasil tiene leyes de protección ambiental muy estrictas. Es uno de los países con más leyes y regulaciones ambientales, y todos los proyectos de construcción requieren la aprobación de las agencias de control ambiental. Hay que solicitar permisos para las diferentes fases de construcción y aprobar la evaluación de impacto ambiental.

Anteriormente, la mayoría de los residentes de Dusambé usaban calentadores eléctricos en invierno. Cuando la temperatura bajaba, toda la familia se acurrucaba alrededor del calentador eléctrico para mantenerse caliente. Durante los apagones, cuando los calentadores no funcionaban, tenían que recurrir a estufas de carbón para cocinar y calentarse, lo que producía grandes cantidades de polvillo que los enfermaba.

Dusambé tenía una red de tuberías para proporcionar calefacción central, pero no había funcionado por varios años. Las tuberías y radiadores en algunos apartamentos habían sido desinstalados y vendidos. Por ende, antes de reanudar la calefacción central, TBEA revisó la red de tuberías de calefacción de la ciudad e instaló nuevos radiadores en los hogares de los habitantes para luego finalmente reanudar la calefacción central. Las personas estaban tan emocionadas que agarraban de las manos a los trabajadores en agradecimiento por mucho tiempo.


Los inviernos ya no son fríos en Dusambé

Cuando Mirzoyev, un empleado de la planta de energía, regresó a su casa del trabajo, fue recibido por una corriente de calor. Su hijo menor vino corriendo hacia él, descalzo, lo tomó de la mano y lo llevó adentro. El piso estaba tibio. Esa noche, cuando el padre de Mirzoyev miraba televisión en el sofá, el calor le hizo quitarse el chaleco de algodón. Antes, nunca se habría imaginado poder quitárselo en invierno. El vapor surgió de la comida que su esposa había preparado y puesto sobre la mesa. Tocó el radiador y sintió el calor de la felicidad a su alcance.

Mientras restauraba la calefacción, TBEA se aseguró de que no tuviera impactos adversos en el hermoso entorno natural de Dusambé. El desarrollo ecológico fue un concepto clave en todo el proceso de construcción. Utilizaron estándares avanzados, tecnología de protección ambiental y equipos para monitorear la descarga del carbón utilizado por la central eléctrica. Los residuos y las cenizas resultantes fueron tratados y reciclados. Los residentes locales apreciaron sus esfuerzos por la protección del medio ambiente.

El amor a China de Lao So

Suhrob, llamado cariñosamente Lao So por sus amigos, es uno de los antiguos empleados de TBEA. Tiene tres hijos, de los cuales el mayor trabaja como intérprete en la planta de energía. Su segundo hijo está estudiando en China y tiene una novia china. El hijo menor tiene la intención de estudiar en China, después de haber estudiado chino durante un año en el Instituto Confucio de Tayikistán. La nieta de Suhrob escucha canciones populares infantiles chinas, incluyendo Una familia afortunada de tres tesoros (Jixiang Sanbao). Toda la familia está estrechamente asociada con China, lo que se deriva del amor a China de Lao So.


Suhrob describe su participación en los proyectos de TBEA

Lao So se unió a TBEA hace 13 años y ha trabajado como conductor, guía, traductor y técnico de mantenimiento. Ha participado en la mayoría de los proyectos de energía de la compañía en Tayikistán y ha sido testigo de los beneficios que la planta de energía No. 2 ha traído a su país.

“La asistencia de China nos ha traído brillo y calidez”, a menudo le dice a su familia. “Estoy orgulloso de ser miembro de la gran familia de una empresa china”.

El invierno en Dusambé todavía es intensamente frío, acompañado de vientos penetrantes. Pero en las noches, la ciudad se mantiene brillante e iluminada, y dentro de los apartamentos las familias disfrutan del calor y la alegría.

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Reseña del proyecto

La central termoeléctrica No. 2 de Dusambé es uno de los proyectos más importantes de beneficio público en Tayikistán. Fue construido por TBEA Co., Ltd., un fabricante chino de transformadores y constructor de proyectos de transmisión.

Ambas fases del proyecto se completaron en diciembre de 2016. Con una capacidad instalada total de 400 megavatios y una capacidad de generación anual de 2.200 millones de kilovatios, la planta puede satisfacer el 60 por ciento de la demanda de electricidad de Dusambé y proporcionar calefacción en invierno a más de 700.000 residentes, cubriendo 4,3 millones de metros cuadrados.

El proyecto ha utilizado estándares tecnológicos avanzados y tecnología de protección del medio ambiente para garantizar emisiones de escape industrial ultra limpias. La carbonera totalmente cerrada de 200.000 toneladas reduce la contaminación secundaria y la tecnología de encendido por plasma utilizada para encender el carbón reduce el consumo de combustible a cero.

La planta también ha fomentado una gran cantidad de talentos para el desarrollo de la industria de energía térmica de Tayikistán. Durante la construcción y operación del proyecto, 150 técnicos tayikos fueron a China para recibir capacitación y mejorar sus habilidades. Además, 300 operadores tayikos han aprendido cómo operar la planta bajo la guía de expertos chinos.